¿Cuál es tu objetivo?

Si te has decidido a cambiar tus hábitos y lanzarte al nuevo reto de ponerte en forma, a parte de darte la enhorabuena, te tengo que hacer una pregunta clave; ¿cuál es tu objetivo?.

Esta pregunta, como ya he dicho, es fundamental. No podemos seguir una rutina y una dieta cualquiera o el plan de entrenamiento de un amigo del gimnasio (algo bastante habitual), porque, como ya iremos viendo más detalladamente, tenemos unas características diferentes y, probablemente, un objetivo distinto.

¿Qué objetivos hay?, esa pregunta parece sencilla... o no. En infinidad de ocasiones me he encontrado con chicos que el lunes me dicen que quieren definirse y bajar peso y a los pocos días han cambiado radicalmente de opinión y quieren meterse de lleno en un plan de volumen por influencias externas; han visto a uno en el gimnasio con mucho volumen muscular o un amigo le ha dicho que se está quedando muy canijo, o internas; se mira al espejo y piensa que por estar haciendo durante dos o tres días una dieta de definición está perdiendo una barbaridad de masa muscular (factor psicológico).

Por lo tanto, tenemos que tener muy claro cuál queremos que sea nuestro objetivo, mantenernos fuertes y fijos en él, para poder trabajar en ello con los factores de alimentación, descanso y entrenamientos.

Cada uno es libre y soberano de definir su objetivo, lo mismo hay gente a la que le sobran objetivamente unos kilitos y quieren seguir aumentando su peso para ponerse "muy grande", mientras que otros a los que buena falta les haría un puchero se empeñan en querer definirse para parecerse a tal actor o tal jugador de fútbol, eso son temas personales en los que yo ni voy ni quiero meterme.

Como ya he dicho, cada uno debe valorar detenidamente hacia dónde quiere ir y escoger su camino, aquellos que ya son habituales del gimnasio y tienen una masa muscular considerable sabrán con mayor precisión establecer su objetivo. Pero ahora me voy a centrar en aquellas personas que no son habituales del gimnasio (hasta el momento) y que pueden obtener un dato significado de su estado de forma y salud calculando el índice de masa corporal.

¿Qué es el índice de masa corporal?, el IMC (sus iniciales) es una medida que nos dará una idea, aportando unos valores, de si nos encontramos en un peso apropiado según nuestro peso y altura.
La fórmula es la siguiente; IMC= masa/estatura al cuadrado.
La masa será nuestro peso en kilogramos y la estatura nuestra altura en metros.
Es decir, una persona de 1,80 metros que pesa 90 kg tendrá un índice de masa corporal de 27,7.

Y ahora, ¿qué hacemos con ese valor que nos ha dado (27,7)?, pues la Organización Mundial de la Salud (OMS) nos da una tabla en la que, según la cifra que tengamos, nos engloba en un peso u otro, así sería:

Peso bajo	< 18,50
Delgadez severa	< 16
Delgadez moderada	16 - 16,99
Delgadez leve	17 - 18,49
Peso normal	18,50 - 24,99
Sobrepeso	> 25
Preobeso	25 - 29,99
Obesidad	> 30
Obesidad leve	30 - 34,99
Obesidad media	35 - 39,99
Obesidad mórbida	> 40

Estos datos son algo orientativo para un sujeto que no tenga una musculatura muy destacada, ya que alguien con un desarrollo muscular elevado saldrá, probablemente, con sobrepeso, cuando realmente no lo tiene, ya que el músculo pesa más que la grasa, lo que dará un resultado erróneo. Por eso, lo más idóneo es acudir a un profesional que nos dará un resultado más preciso, tomando en cuenta otros datos, nos dirá si nuestro peso es correcto o si tenemos que aumentarlo o bajarlo.

En definitiva, lo que tenemos que tener claro es obtener un objetivo físico con el que nos sintamos cómodos y, sobre todo, que nos proporcione un buen estado de salud para poder disfrutarlo.